La adsorción es un proceso por el cual moléculas de impurezas se adhieren a la superficie del carbón activado, la adherencia es gobernada por una atracción electro-química, el carbón activado es preparado a partir de diversos materiales, tales como, carbón, madera, cáscaras de nueces, turba y petróleo. El carbón se transforma en “activado” cuando es calentado a altas temperaturas (800 oC a 100oC) en la ausencia de oxígeno.

El resultado es la creación de millones de poros microscópicos en la superficie del carbón. Esta enorme cantidad de área superficial proporciona grandes oportunidades para que tenga lugar el proceso de adsorción. El carbón activado tiene una fuerte atracción adsorbida para otras moléculas (orgánicas) basadas en el carbono, y es excelente en retener firmemente moléculas más pesadas tales como compuestos orgánicos aromáticos (aquellos que pueden ser olidos).

El proceso de adsorción trabaja como un imán para mantener las impurezas en la superficie del carbón activado. Esto es una acción diferente de aquella que actúa como una esponja en el proceso de absorción, en el cual un gas o líquido es succionado hasta el centro del cuerpo poroso y allí mantenido, este proceso absorbe sabores y olores. (Eliminación de cloro).

FILTRACIÓN DE CARBÓN ACTIVADO (F.C.)